La cuarta generación de la familia Lucendo, formada por Rafael y Fede, dos jóvenes hermanos enólogos, enamorados de terruños viejos y olvidados, donde la intervención humana apenas es necesaria, con una clara filosofía de orientar el cultivo del viñedo al ecológico; focaliza todo su conocimiento en intentar extraer el máximo potencial del terruño, respetando al máximo las uvas en los procesos de elaboración y crianza.
Bodega situada en el pequeño municipio toledano de Quero, cuentan con los viñedos ecológicos más longevos de la región, incluso prefiloxéricos, donde los vinos se elaboran en jarras de barro tanto enterradas como aéreas.
Ellos creen sinceramente que la pequeña producción, los vinos artesanales hechos cuidadosamente y con integridad es la mejor manera de hacer vino.
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